Ujfalusi será uno de los jugadores que pagarán los platos rotos del mal momento de la selección de su país, Checa. El central del Atlético de Madrid anunció su marcha de la escuadra nacional “debido al ambiente que reina dentro de la Federación y en medios periodísticos”, en declaraciones a la agencia local CTK.
Pese a esa renuncia pública, lo cierto es que la Federación Checa ya había decidido expulsarle de la selección a él y a cinco jugadores más –entre ellos, el atacante del Galatasaray Milan Baros– después de que fuesen sorprendidos por periodistas de su país con prostitutas en un restaurante después del partido contra Eslovaquia, en el que Checa empató sin goles y vio cómo sus opciones de clasificarse para el Mundial se alejan.
Si bien los jugadores no estaban sujetos a obligaciones con la selección en aquel momento, la velada desató las críticas de algunos patrocinadores de la escuadra y de miembros de la propia Federación. Ujfalusi, de 31 años, pondrá de una forma muy triste punto final a su carrera como internacional.
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